El bacalao forma parte del grupo conocido como pescado blanco y es un alimento muy recomendado por los expertos. El bacalao se sala en capas alternas de aceite y sal durante 18 horas. Posteriormente, se ahúma durante unas 17-40h a una temperatura de entre 20º y 30ºC, y por último, se corta. El bacalao ahumado en aceite se presenta al cliente introducido en aceite, de forma fileteada, y envasado al vacío.Sus lonchas son finas y fáciles de separar.

El bacalao es un pescado muy ligero, bajo en grasa y en calorías, por lo que es un alimento ideal para mantener una dieta sana y equilibrada. Los beneficios del bacalao para la salud son los siguientes: gracias a sus ácidos grasos Omega 3, ayuda a reducir el colesterol y triglicéridos, por lo que es importante para nuestro sistema cardiovascular. 

El atún se lava y se seca en capas alternas de sal y azúcar durante 24-48 horas. Posteriormente, durante otras 24-48 horas, se sumerge en salmuera, consiguiendo así una curación perfecta. Para terminar, se escurre, se vuelve a secar y se ahuma durante 17 a 40 horas a una temperatura de entre 20º y 30ºC. Para conservar el atún ahumado de aleta amarilla en condiciones óptimas, lo ideal es mantenerlo en frío a una temperatura de entre 0º y 4ºC. Una vez abierto el envase, se recomienda consumir antes de 8 días.

El atún ahumado se elabora a partir del atún de aleta amarilla o yellowfin (Thunnus albacares), capturado con Redes de Cerco y Redes Izadas en la Zona FAO 34 en el Atlántico Centro-Este. Disponible durante todo el año.

La ijada de atún es una las más delicadas partes. Proviene de la barriga del atún. Contiene un alto índice de grasa que le aporta un delicado sabor.

Uno de los grandes desconocidos en el mundo de las salazones. Sabor potente, textura sorprendente. Muy recomendable.

Ingredientes: Sarda, aceite de girasol y sal

La sarda en aceite de Herpac es un producto ideal para preparar un aperitivo de altura gracias a su exquisito sabor y suave textura.

Uno de los grandes desconocidos en el mundo de las salazones. Sabor potente, textura sorprendente. Muy recomendable.

La hueva de mújol es conocida como el caviar del Mediterráneo y muy valorada por tener un intenso sabor a mar, incluso más que la mojama IGP. Tan solo se elabora con sal marina.

Proviene de los huevos de las hembras del mújol (o más conocido como Pez Lisa), y tras su extracción, se procede a salar y secar. El proceso de secado es mixto al igual que en cualquier otro salazón, donde se fusionan aire natural y artificial para conseguir un acabado irresistible. En el extranjero, la hueva de mújol es conocida como Bottarga, y es ideal para potenciar el sabor de nuestros platos de pasta, ensaladas, pizzas… convirtiéndolos en una auténtica maravilla para el paladar.

Las huevas de maruca se han convertido en los últimos años en uno de los manjares marinos más codiciados. Y es que son de esos productos que complacen a los paladares más exigentes gracias su textura, suavidad e intenso sabor a mar. Son los huevos extraídos del pescado ‘’maruca’’, un pez muy similar al Bacalao.

Se elaboran de manera natural. Pasan por un proceso de salazón para deshidratarlas, luego se lavan y se secan en un ambiente mixto de aire natural y secadero artificial, lo que les confiere su característico sabor marino.

Se puede disfrutar de múltiples maneras, desde tostas hasta ensaladas, y suele acompañarse de frutos secos y un chorro de aceite de oliva virgen extra.

Mojama de atún Extra amparada por la IGP Mojama de Barbate. La más alta calidad en una pieza elaborada solo con lomos de atún, sal marina y agua. Una delicatessen para los amantes del sabor a mar.

Está elaborada de manera completamente artesanal, sin conservantes, edulcorantes ni aditivos. Se seca con una fusión de aire natural y artificial que permiten un perfecto acabado. La temperatura, dirección del viento y humedad característicos de la zona, hacen que el proceso de elaboración de la mojama sea único.

Su forma tradicional de comerla es tal cual y cortada a lonchas, pero también se pueden elaborar numerosas recetas con la mojama. Por ejemplo, se puede echar en salmorejo, acompañar de frutos secos… de cualquier manera, el éxito está asegurado.